miércoles, 29 de febrero de 2012

CAPITULO 20

-Vale, vale...tengo una-dice Carlos

Todos hemos aceptado la proposición de Marcos para jugar a “Yo nunca…”. Llevamos cinco minutos jugando. Empezamos con cosas flojitas, sin importancia.

-Yo nunca…-continua- yo nunca me he bañando en una piscina con ropa

Nat, Celia y yo nos miramos y damos un trago al chupito de tequila. Marcos bebe también. Los demás dejan el baso lleno y nos servimos otro chupito.

-¿Cómo es que nunca os habéis bañado con ropa?-pregunta Celia
-No ha surgido la ocasión
-Si es que no quieren que Mami se enfade por mojar la ropa con cloro-les chincha Marcos
-Capullo-responde Manu riendo
-Yo nunca-empieza Nat- he besado a una chica-

Todos los chicos beben. Obvio.

-Obvio-dice Fran como si me hubiese leído el pensamiento-y seguro que vosotras también
-Nosotras hacemos otras cosas-dice Celia con voz picara. Le está haciendo efecto el alcohol
-Bueno, bueno, yo nunca me he liado, y con eso me refiero a solo morreo,  con más de una persona en un día-dice Fran

Bebemos Nat, Manu, Marcos, Carlos y yo. Si, fueron dos tíos con los que me lié. No me juzguéis, era una fiesta, y no les iba a ver en la vida.

-Yo nunca he hecho el amor con nadie- se pone interesante con la frase de Nat
-¡Bebo!-grita Marcos, que por lo que hemos podido comprobar, es el más estrafalario del grupo
-Cállate tío-le da un calmante Carlos

Bebemos todos menos Manu. Pobrecito, se ha puesto rojo. Os estará sorprendiendo que Celia haya bebido también, pero perdió la virginidad antes que Nat y yo. No lo parece ¿verdad?

-Eso se puede arreglar-comenta Nat al ver que Manu no bebe
-¡¡Una indirecta muy directa!!- le pega un codazo Fran a Manu

Sonríe tímidamente. Pero que mono
Inesperadamente, bueno, esperadamente, Nat se levanta y le planta un morreo a Manu. Este primero se sorprende y después continúa el beso. Todos estamos con la boca abierta y nos empezamos a reír. Manu se aparta y dice

-Yo nunca me he liado con nadie de está habitación

Beben Nat y Manu.

-¡Eso no vale!- se queja Marcos- yo también quiero beber-nos mira a Celia y a mí
-Paso-digo riendo
-Por ahora no- apremia Cel
-Pero que aburridas sois

Llaman a la puerta y Carlos se levanta y va a abrir. Aparecen tres rubias, las dos que están detrás son teñidas, canta a la legua. ¿La del medio no es la que intento ligar con mi hermano el año pasado? Menos mal que a Álvaro no le van las pijas.

-¡Hola chicas! ¿Qué hacéis aquí?-pregunta Carlos extrañado- hemos quedado ¿recordaís?-dice señalándonos
 -¿Y por que no estamos todos juntos?-propone con una ¿sonrisa?, eso no es una sonrisa, es una mueca- ¿Qué hay Fran?

Fran, que estaba un poco empanado se acaba de percatar de la presencia de la rubia cara rancia y son clones de imitación. Cosa, que provoca que se atragante con la bebida. ¿Qué pasa aquí…?

lunes, 27 de febrero de 2012

CAPITULO 19

-Así que todas tenéis dieciséis años…
-Bueno, yo los cumplo en Mayo-corrige Nat a Marcos mientras sonríe pícaramente a Manu

Estamos en un local que ellos alquilaron hace dos años para pasar las tardes. Es bastante grande, tiene cinco sofás y dos puff desperdigados por la habitación. Una televisión, no muy grande, una radio y un pequeño baño, pero nos han recomendado que no entremos. Así que, por mi propio bien, no lo haré. La habitación está llena de humo de cachimba. Huele a chicle.
Estoy sentada al lado de Manu y Carlos en un sofá, Fran en un puff, Marcos y Celia en otro sofá y Nat en el puff sobrante en frente de Manu.

-Cuando os vimos, pensé <<Me lo voy ha pasar bien con estas chicas>>-comenta Carlos pasándome un brazo por mis hombros, no tan disimuladamente como cree.

Instintivamente miro a Fran. Está con la vista dirigida a otro lado bebiendo de un botellín. Pongo los ojos en blanco y le doy una calada a la cachimba para desembarazarme del brazo de Carlos. El ambiente está muy relajado y parece que soy la única que no se siente a gusto. Estoy absorta leyendo las frases que están escritas en la pared cuando oigo la voz de Fran:

-Sara, ¿podemos hablar?
-Claro

Me levanto y nos dirigimos a un sofá un tanto apartado de los demás y nos sentamos.

-¿Estás molesta con migo por lo del sábado?
-Vaya, tu si que sabes ir al grano- digo sorprendida de que haya abarcado el tema con tanta facilidad.
-¿Puedes contestar, por favor?-me pide mas como una pregunta que como una orden
-Si, bueno, no…contigo no-puntualizo
-¿Seguro?
-A ver, en el partido fui un poco borde porque estaba molesta-explico-pero tu no tienes la culpa…
-Los de mi equipo son un tanto gilipollas-interrumpe con una sonrisa- no te lo tomes en serio, no les llega la sangre al cerebro

Me río.

-No pasa nada, os dimos una paliza, así que…
-¿Cómo que una paliza?-dice pretendiendo parecer ofendido poniéndose una mano sobre el pecho-Es trampa distraernos levantándoos la camiseta-finaliza levantando las cejas
-¡Fue para secarme la cara!-me excuso, menos mal que no se me nota cuando me pongo roja- si que te fijas.
-Ya, ya, para secarte la cara…

Seguimos discutiendo entre risas y bromas hasta que decidimos volver con los demás. Veo a Nat haciendo un cruce de piernas a lo Sharon Stone en “Instinto Básico”. Y acto seguido, a Manu revolviéndose inquieto en el sofá. Se lo ha visto todo. No puedo evitar soltar una carcajada. Lo que provoca que todos me miren y se rían también

-Chicos, ¿qué os parece si jugamos a “Yo nunca…”? 

jueves, 23 de febrero de 2012

CAPITULO 18


Jueves. Hoy quedamos con Marcos, Manu, Carlos y Fran. Natalia está decidida a liarse con Manu. Estamos las tres en mi casa, Nat mirándose en el espejo y Celia tumbada en la cama leyendo una revista. Natalia lleva una mini falda negra ajustada, de esas que están unos centímetros por encima del ombligo y unos centímetros por debajo del pecho que están muy de moda ahora, y arriba una camiseta ajustada también por dentro de la falda, roja y de tirantes, zapatos de tacón del mismo color que la camiseta . Celia va con un short vaquero blanco y una camiseta de manga corta azul clarito con unas “Converse All Star” negras. Yo todavía estoy mirando lo que me voy a poner. He dejado en un montón de ropa en una esquina, toda la que me compre cuando salía con Juan. Ahora que la miro no me gusta nada, no es mi estilo.

Me decanto por una falda vaquera ajustada y una camiseta de hombro caído, blanca, en la que pone con letras negras: “MUSIC IS MY BOYFRIEND”  Me la ato a un lado, dejando ver un poco el ombligo, no mucho. Para estar en principios de Abril hace demasiado calor. Me enfundo en unas medias transparentes y unos botines negros. Me pongo al lado de Nat para mirarme en el espejo.

-¡Qué capulla!, estas negra, jodía…- me dice- si es que el color se me va enseguida, y a ti te dura hasta el verano, pero como en verano tomas el sol, vuelves ha estar negra, te dura hasta el verano siguiente y así sucesivamente…es un circulo vicioso
-Anda Nat, lo que yo Daria por una piel tan bonita como la tuya- le digo topando mi moflete contra el suyo- como el culito de un bebé
-El perro que se muerde la cola- dice haciendo alusión a mi color de piel
-Dejadlo ya- interrumpe Celia sin levantar la vista de la revista- las dos tenéis una piel de anuncio así que dejad de restregaros cara con cara, a ver si va a entrar alguien y va a pensar cosas raras…
-Como Jaime antes- se carcajea Nat
-Idiota-le reprimo entre risas también

Celia levanta la cabeza y nos mira fijamente unos segundos.

-Mmmmmm… prefiero no saberlo- dice por fin
-Uy lo que nos ha dicho- dice Nat
-Eso en mi pueblo es pelea- continuo yo

Nos tiramos encima de ella y nos hacemos cosquillas entre nosotras. Cuando por fin acabamos, a Nat y a mi se nos ha movido la falda y a celia se le ha subido la camiseta y se le ve el sujetador. Nos reímos. Colocamos nuestra ropa y salimos de casa. Que hemos quedado con cuatro chicos muy majotes y Fran me tiene que dar una explicación por el comportamiento de sus amigos en el partido…

martes, 21 de febrero de 2012

CAPITULO 17


Latín. La única clase de la semana en la que estamos las tres juntas. La oportunidad es ahora, y tengo q aprovecharla. Arranco una hoja de atrás del cuaderno y empiezo ha escribir

                   Celia! No te enfades con nosotras, no quiero que nos peleemos, a de más, solo   
                      nos preocupamos por ti… :(

                   Es verdad! No queremos que te hagan daño, piénsalo, los acosadores están en todas partes y 
                      con lo buena que tu estas seguro que alguno te echa el anzuelo :(

                   Tenéis razón chicas, pero es que lo de Pedro es asunto mío, y no quiero que siempre esteis   
                      pendientes de mi, siempre preocupándoos…

                  Pero que dices, si eres tú la que nos salva el culo siempre. ¿Pedro? Que clase de tio es ese?  
                      Pedro Picapiedra? Conduce un coche que va a pies y es el mejor amigo de Pablo? Y dice  
                     << Yaba yaba dooooooooo!>>?

                 Y tiene un dinosaurio de mascota? Y su hija se llama Pevels? y el microondas es una piedra? Y         
                      tiene una maza de madera?
            
                 Dejar de decir tonterías! Después en el recreo hablamos, que nos van a pillar con la nota y voy 
                     muy justita en latín…
             
                 Oh si, súper justísima, esq cateas de fijo -.-

                 Justita con un 8? Estas de coña? Lo que daría yo por un 8 en cualquier asignatura….


Celia arruga la nota y se la mete en el bolsillo, estamos las tres más animadas que antes. Empiezo a tomar apuntes, pero 5 minutos después cae una nota en mi mesa, miro para tras. Visualizo ha Nacho haciéndome señas, es de él. Estoy abriendo la notita cuando de repente desaparece de mis manos, miro a los lados y cuando miro al frente, ahí esta,  “Ovelix”, con cara de cabreo y la nota que me habían mandado en la mano.

-Hola profe…-digo con cara de niña buena lo que provoca risas en la clase
-Déjate de bromitas Sara, ¿qué es este papel?- me pregunta sabiendo perfectamente lo que es.
-Pues no se profe, si me dejas leerlo te lo digo-más risas, la cara de Ovelix cada vez más roja de ira- o si quieres lo lees tu, y así nos ahorramos tiempo, digo yo…
-Mire Sara, usted estos últimos meses estaba menos rebelde- me dice, pongo los ojos en blanco, acto que no pasa desapercibido ni por él, ni por el resto de la clase lo que provoca carcajadas de alguno que ya no aguantaban más- y antes  te salvabas siempre por que en los exámenes sacabas buenas notas,¿no querrás volver a las andadas?
-No claro que no, José María- digo intentando parecer sincera

Se da media vuelta mientras rompe la nota y la echa en la papelera. En el mismo momento le hago un gesto que quiere decir: “vas tu listo que te voy a hacer caso”
Más risas. Se da la vuelta, pero yo he sido demasiado rápida y hago que copio lo de la pizarra. Continúa con su explicación un tanto mosqueado. Vuelvo a ser como antes, dueña de mi vida y nadie me dice lo que tengo que hacer. Juan me cambió totalmente, buenacita en clase, dejar de hacer lo que me gusta para estar con él. ¡Mírame! Si voy vestida como una niña pija. Creo que la ropa que esta en el fondo del armario va a volver después del olvido…

domingo, 19 de febrero de 2012

CAPITULO 16

Nos dirigimos a clase. Jaime se ha ido con lo tíos y yo voy por el camino con Natalia. Estamos ensatando para decirle ha Celia: <<Pillada>>. Bueno, no le vamos a decir “pillada”, es un decir. La vemos a lo lejos en la puerta del tuto. Cada vez estamos más cerca hasta que llegamos.

-¡Hola Juapis!-nos saluda dándonos un sonoro beso a cada una
-Hola ¿estas mejor?-pregunto
-Si, ahora me encuentro mucho mejor-se excusa-me duele un poco la garganta todavía pero nada-sonríe

Nos miramos. Desde cuando es tan buena mentirosa, aquí las profesionales somos nosotras no ella.

-Empieza tu- me apremia Nat
-¡Que va! Tu primero que te explicas mejor-rebato empujándola hacia delante
-Que no, que tu…
-¡¿Queréis contarme ya lo que pasa?!-interrumpe Celia  

Inspiramos hondo y nos miramos.

-Sabemos que ayer no estabas enferma-digo por fin mientras Natalia asiente
-¿Pero…que…que decís?-pregunta con una risita nerviosa
-Llamamos a tu casa y tu madre nos dijo que todavía no habías vuelto del instituto-dice Nat
-¡Y la voz masculina!-añado
-Veréis…es una larga historia
-Tenemos todo el tiempo del mundo

Nos mira, preguntándose cual va a ser nuestra reacción. Tiene los ojos desorbitados, esperando que algo la salve. Pero faltan diez minutos para que suene la campana y la gente que pasa nota la tensión y pasan de largo. Seguro que están pensando: << ¿Problemas en el paraíso?>> o <<Vaya, el trío demoniaco tiene problemas>>. Si, es así como nos llaman, unas de las muchas maneras. La gente lo ve raro porque nunca nos peleamos.

-A ver…hace unos meses conocí a un chico en Internet muy majo y quedamos el viernes…
-Espera, espera… ¡STOP!- interrumpe Nat-¿Internet? ¿Pero en que estabas pensando?
-¡¿Y si es un maniaco sexual?!-grito sin querer, cosa que hace que todo el mundo mire-¿Y si te viola o algo?-susurro
-Nos es un maniaco sexual, se ha portado muy bien con migo…
-¿Habéis quedado ya? ¿Pero tu estás tonta?- pregunta Nat
-¿Por que no nos lo has dicho?
-Mira, Pedro es muy majo y buena persona, estamos conociéndonos y a lo mejor surge algo- le defiende- así que no es de vuestra incumbencia.

-¡¿Perdon?!-Nat y yo a la vez

Pero Celia da media vuelta y entra al instituto. ¿Cómo que Pedro?


sábado, 18 de febrero de 2012

CAPITULO 15

-No es lo que parece…-me excuso apresuradamente después de unos segundos de silencio incomodo

¿Solo se me ha ocurrido decir eso? ¿No es lo que parece? Por el amor de dios, cada vez me llega menos sangre al cerebro. Esa es la típica frase que se dice cuando SI es lo que parece.

-Que disfrutéis de la cena- dice, haciendo caso omiso y mi comentario, con una sonrisa
-Igualmente…-contestamos Nat y yo a la vez

Jaime cierra la puerta y se va, como si no hubiese pasado nada, como si no hubiera acabado de ver un preservativo usado saliendo de mi papelera, que antes de que el se fuese, no estaba.

-Se ha ido
-Y no a dicho nada-apremia Nat
-¿Y si se lo cuenta a mi hermano?-pregunto asustada

A ningún chico le gusta que se tiren a su hermana. Y menos que sea uno de tus mejores amigos, pienso yo. Álvaro creo que nunca se entero que me acosté con Mario hace unos meses. Sabe que el esta enamorado de mi. ¿O solo aparenta estar enamorado de mí? ¿Y si no lo está? ¿Y si solo me quiere como objeto sexual? Por que yo no entiendo nada. Hace siete meses me cameló para llevarme a la cama, y ahora igual. Es como un imán, siempre intentando algo, intento no picar, pero esta vez no lo he conseguido. Me siento fatal.

-¡Tú! Que empanada mental tienes encima- dice Nat dándome un chopito en la frente- te estoy preguntando que, caso aparte a lo de Mario, ¿Qué vas ha hacer con Juan?
-¿Qué quieres que haga?
-Te engaño Sara, te manipulo, salio con tigo por una apuesta, se acostó con tigo por una apuesta- me dice abriéndome los ojos- a esa rata hay que darle su merecido.

-No se que hacer…
-Mira, el jueves hemos quedado con los del “Mac” y te puedes liar con alguno-propone-¡Pero yo me pido a Manu!
-¡Si señor!-bromeo entre risas por lo de Manu

Ponemos la tele y nos zampamos la cena y cuando acabamos hablamos de chicos. Después de mucho insistir, le cuento a como ha sido hacerlo con Mario. Se pone ha hacer el tonto y decir “Oh… si…mmm…Mario” mientras, yo, le pongo el cojín en la boca por que para que se calle y nadie la escuche. Acaba en una pelea de almohadas en la que, al terminar, echamos de menos ha Celia. No nos podemos creer que nos haya mentido, a nosotras. Suena un pitidito en mi móvil que me indica que tengo un <<Whats app>>.

-¿Quién es?-pregunta Nat
-Nadie, una conversación grupal- miento, ya se lo diré, pero esto lo tengo que arreglar sola.

Empiezo a leer el mensaje que me acaba de enviar Juan

<<Mira, deja de hacerte la victima porque no he hecho nada malo. Aquí, el que te ha tenido que aguantar tus chorradas y tus manías en esta relación he sido yo. Así que vete con tu amiguito Jaime y procura ser un poco más amable>>

Me doy la vuelta. Una lágrima corre por mi mejilla, que rápidamente seco con la manga del jersey. Miro hacia tras. Nat no se ha dado cuenta, esta demasiado concentrada intentando abrir la tapa de su respectivo móvil. Me dispongo a responder a Juan.

<<Pobre Juan, que me ha tenido que aguantar. Pero claro, tenias que conseguirlo, una apuesta es una apuesta ¿no? Mira, olvídame>>

Le voy a dar al botón de enviar cuando veo que le falta algo al mensaje.

…¡Y que sepas que le voy a decir a todo el mundo que la tienes pequeña!>>

Esta vez si lo envío. Me estoy volviendo una mala persona. Sonrío. Seguro que ahora Juan estará temiendo lo que la gente piense de su miembro cuando corra el rumor. Está claro que no lo voy ha hacer, soy mala pero no tanto. Por lo menos así le doy un escarmiento.

-¡Nat!-me mira- este sábado hay fiesta semáforo en Elite ¿no?
-Si ¿por?- se le iluminan los ojos- No me digas que vamos a ir. Hace mil que no vamos
-Pues claro. Me has preguntado que iba ha hacer con lo de Juan. Y he pensado que un clavo saca a otro clavo ¿no?-digo con una sonrisa de medio lado
-¿Vuelven los viejos tiempos?
-Vuelven los viejos tiempos

Este sábado va a ser muy interesante…

viernes, 17 de febrero de 2012

CAPITULO 14


¡No, no, no, no, no…! ¿Por qué? Si es que soy tonta, pero tonta, tonta, tonta…Guarra Sara, que eres una guarra. ¿Por qué te has acostado con Mario? No, eso no se hace. Me sujeto la cabeza con as manos y me incorporo en el sofá. No se cae dos veces en la misma piedra. Le miro. Esta sonriendo.

-Mira Mario, esto no ha significado NADA- recalco la última palabra- ¿entendido? Y vístete por favor- le reprimo mientras me pongo, yo, mi ropa.
-¿Cómo que nada? Si no fuese nada, no te hubieses disfrutado tanto- dice con una sonrisa de medio lado- ¿no crees?
-¡¿Pero qué?!- grito indignada- ¿Tu eres tonto o pellizcas cristales con guantes de boxeo? Solo ha sido el calentón de momento, nada más.

Esta apunto de decir algo pero oímos un juego de llaves, intentando localizar la cerradura, al otro lado de la puerta. Mario y yo nos miramos con una mirada de pánico. Yo estoy vestida, pero el esta sin camiseta-joder que tableta- y no le da tiempo a ponérsela. Cojo el condón con un folio que hay en la mesa con sumo cuidado con no tocar nada. Pero Jaime y Álvaro ya han entrado. Nos quedamos inmovilizados, pero para nuestra suerte, se dirigen a la cocina en vez de al salón. Me dirijo a las escaleras y subo corriendo intentando hacer el mínimo ruido. Tiro la gomita a la papelera junto con el folio y me siento en la cama con el ordenador. Me percato de que está apagado y doy varias veces al botón de encender deseando que nadie suba a mi habitación. Afortunadamente nadie lo hace. Oigo a mi hermano preguntar:

-¿Qué coño haces sin camiseta, Mario?
-Es que tengo un calor de perros ¿vosotros no?

Si se lo han creído es que son más tontos de lo que pensaba. Pasan los minutos mientras rezo que no se enteren de lo ocurrido en su ausencia. Diez minutos después llega Natalia y entra en mi cuarto abriendo la puerta de golpe que hace que se me pare el corazón por que tengo los nervios a flor de piel.

-Mira que mochila más molongui- me dice poniéndomela en la cara- ¿Qué te pasa? Parece que has visto un fantasma…
-¿Hay mal ambiente hay abajo entre los hombres?-pregunto
-No, están jugando a la play los tres- responde extrañada- y comiendo su parte de la cena. McDonal. Hablando del “Mac”. Hemos quedado con los del otro día este jueves.

-Me he acostado con Mario- digo con la mirada perdida cuando me doy cuenta de lo que me ha dicho- ¿Fran y estos?

-¡¡¿QUÉ?!!- me grita al oído- ¿Por qué has hecho eso?- dice mas bajo
-No lo se -respondo frustrada- Me beso, le bese y hemos acabado haciendo chirriar los muelles del sofá.
-¿En que postura?- pregunta inconscientemente- ¡No me mires así! Hace mil que no hecho un pinchito.
Acabamos riéndonos a carcajadas por lo ultimo dicho y también por mi nerviosismo. No debería haber follado con él. Soy mala persona, se va ha hacer ilusiones. Y si se lo cuenta a alguien le mato, le arranco las pelotas y se las doy de comer al perro del vecino.

-¿Tu crees que me estoy volviendo una puta? –pregunto con tono triste a Nat
-¡Qué va! Por trincarte a Mister musculitos no va a pasar nada- hace referencia a Mario- a de más, es sano un polvete de vez en cuando, los científicos lo dicen, te deja la piel mas brillante y suave- añade sobándome la cara con las dos manos- Mira que suave…

Y en ese momento entra Jaime con la nuestra parte de la cena. Y nos coge en pleno sobeteo de cara. Le miramos  y Nat sin apartar las manos de mi cara. Nos mira.

-¡Rollito raroo!-exclama con una sonrisa- vuestra cena
-Gracias- responde Nat soltando mi rostro para coger su parte
-Gracias-repito
-De nada

Va a salir de la habitación cuando su mirada se fija en un punto. Nat y yo seguimos su mirada. Y lo que vemos nos deja sin habla. El folio si entro en la papelera, el condón se quedo colgando a medias. Las dos nos miramos a los ojos buscando una respuesta a la pregunta que Jaime pueda hacer. La he cagado pero bien…

miércoles, 15 de febrero de 2012

CAPITULO 13


Me quedo pensativa durante unos minutos.

-¿Cómo que una apuesta…?-pregunto imaginándome la respuesta
-Pues eso…-empieza a contar- que Juan solo salio contigo por una apuesta…por un: a que no consigues salir con Sara Méndez…Me he enterado antes de venir aquí.

Sigue la historia y escucho atentamente lo que Nat me cuenta sin decir nada. Cada palabra estoy un tanto más sorprendida.

-…y eso…que la apuesta consistía en que cuando consiguiese que os acostaseis juntos te tendría que dejar…Pero según me ha contado Iñigo, el no quería cortar contigo, pero una apuesta es una apuesta.
-Si no quería cortar que no hubiese cortado, eso no es escusa- digo con una serenidad que no veía capaz en mi sobre este tema
-Eso mismo le he dicho yo- me dice Nat sonriendo al ver mi calma.

Sacamos los deberes, y empezamos, pero al segundo ejercicio ya estamos distraídas. Hablamos sobre Celia, Juan y a mi pesar, de Jaime. Y al darnos cuenta que hemos dejado abarcados nuestros deberes dice Nat:

-¿Ves? Por esto Celia no puede volverse rebelde
-Ya, ella es el pilar de nuestra amistad, si ella no esta, nosotras nos derrumbamos-añado
-Bueno, bueno, solo han pasado unas horas desde que no la vemos, relajémonos.
-Si, pero no la hemos visto porque ha hecho ¡PE-LLAS!- exclamo- espera… ¿el viernes?
-¿El viernes qué?-dice sin enterarse de nada
-Pues eso, que el viernes no quedo y estaba rara-razono-a lo mejor no quedo por el mismo motivo que hoy no ha ido a clase. Piénsalo, tiene sentido.
-Tienes razón-se ve en sus ojos que se le ha encendido una bombilla- ¡y todo es culpa de la voz que hemos escuchado cuando hemos hablado con ella!
-De la voz de hombre-aclaro
-De hombre-repite

Quedamos en decirle mañana que sabemos que nos mintió. Planeamos el COMO decírselo, por que, si Cel nos miente, es porque sucede algo gordo. Jaime entra sin previo aviso en la habitación y las dos pegamos un chillido.
-Tranquilas-dice riéndose- No, enserio, ¿Por qué gritáis?-pregunta con su melodiosa risa después.
-¡Joder!¡No. Nos. Pegues. Más. Sustos!- consigo decir palabra a palabra tirando un cojín a su cara.
-Vale, vale-vuelve a reír- Solo venía ha decir que vamos a comprar la cena, que se queda ese tal Mario. Por cierto, ¿Qué le pasa?
-Qué se ha enamoró de Sara nada mas probar su chirla- contesta Nat con voz cantarina

Le tiro a ella también un cojín a la cara para que se calle.

-¡Nat!-reprocho

Jaime me mira fijamente muy serio para después decir:

-Yo creí que eras virgen-dice, esta vez sin sonreír.

Le miro atónita ¿Enserio? ¿Doy esa impresión? Sin previo aviso Nat se empieza ha reír ha carcajadas. La miramos.

-¿Sara?... ¿Vir…Virgen?- pregunta retóricamente entre espasmos y risas- ¿Enserio? ¡JAJAJAJA!
-¡Ni que fuera una fulana!-le contesto
-No, pero tampoco eres una monjita-vuelve ha reírse
-Cállate-digo, no se porque, sonriendo
-Entonces-interviene Jaime- ¿no eres virgen?
-Desde hace un año y medio-contesta Nat
-Pero déjame hablar a mi- suspiro

Me sonríe. Sonrío. Pero Jaime no hace lo mismo.

-Bueno, pues nos vamos a comprar-sale de mi habitación y más tarde oímos la puerta de la entrada cerrarse.
Natalia se sigue riendo
-Tonta
-Estaba celoso-me informa
-¿Estas de coña? NO- niego riéndome-¿Por qué no te quedas a dormir?- propongo
-Es lunes
-¿Y?
-¡Nada! Mi madre tiene hoy guardia así que…-se pone los zapatos y coge sus llaves-Me voy a por mis cosas. Adiós

Una vez se ha ido, salgo de mi habitación y me dirijo a la cocina. Me estoy preparando unos cereales cuando oigo una voz detrás de mí:

-Parece que nos hemos quedado solos- susurra Mario a mi oído
-¡¿No te habías ido?!-me doy la vuelta rápidamente asustada por que creía que no había nadie en casa.

Y sin previo aviso, introduce su lengua en mi boca y la mueve ligeramente. Y lo que es peor, no lo rechazo.

-Esto no esta bien- digo más para mi misma que para él
-Si lo está-afirma y pensando en todo lo que me ha echo Juan pienso <<Why not?>>

Y esta vez el beso es más apasionado, con unas intenciones menos puras. Sin siquiera pensarlo rodeo mis piernas entorno a él. Se que es un calentón pero no puedo parar. Mi yo interno me dice que no debería estar haciendo esto, que al estar enamorado de mí, le puedo hacer daño. Pero mi instinto traiciona a mi subconsciente. Soy yo o Mario esta increíble. Siempre ha sido guapo pero... Me eleva y me lleva hacia el salón y me tira en el sofá para después colocarse encima y sucumbo a sus encantos. Me dejo llevar por algo mas que un simple beso, algo que hace siete meses no deberíamos haber hecho y que ahora, tampoco…

CAPITULO 12

 -…estas de coña ¿no?- pregunta Nat sorprendida, se quita los zapatos y se tumba al lado mío en la cama- ¿Cómo va ha hacer pellas Cel? ¿Hola? ¡Es Celia!
- Que si, que si- digo rápidamente- que se ha fumado las clases como dios manda. He llamado a su casa y cree que esta en el instituto.
-No es posible- abre los ojos como yo lo hice cuando me enteré- a lo mejor se ha desmallado a medio camino, o la han secuestrado…
-¿La llamamos al móvil?- pregunto nerviosa
-Llama- me tira el móvil al regazo.
-Llama tú-digo devolviéndoselo
-Tú
-No, tú
-¿Las dos?- propone-poniendo el altavoz
-Va

Busca en la agenda y llama activando el altavoz

-¿Si?- responde nuestra Celia con voz sofocada
-¿Celia? ¿Estas bien? ¿Te han secuestrado?...-grito fuera de mi
-¿Qué? ¡No!-dice medio riéndose
-¿Seguro? ¡¿Entonces por qué no has ido a clase?!
-Es que estoy mala- responde tosiendo- y me he quedado en casa

Nat y yo cruzamos una mirada. Y antes de que Nat diga nada me adelanto

-¡Joder! ¡Que susto!-digo intentando sonar sincera cuando oímos una voz masculina al otro lado del teléfono.
-¿Qué es eso?- preguntamos las dos a la vez cada segundo mas preocupadas.
-¿Eh? Nada, la tele- comenta como de pasada creyendo que no sabemos la verdad- bueno, que os tengo que colgar, adiós guapas.
-Adiós…-nos despedimos al unísono atónitas.

Guardamos silencio durante un minuto.

-No es posible…-dice- Cel es la responsable…
-Lo se…-continuo- ¿Qué coño?
-No se…

Más silencio.

- Tengo otra mala noticia-arranca por fin Natalia- fue una apuesta.
-¿Qué…?

CAPITULO 11

Como me esperaba, Nacho le ha contado a Jaime, en el cambio de clase, lo mío con Juan, y este ha su vez se ha pasado la hora siguiente mirando de uno a otro. Celia no ha aparecido, y eso es raro en ella. Ahora estamos yendo a casa Jaime y yo. Había quedado con Nat y con Celia en quedar para estudiar, pero si Celia esta enferma, no va a haber nadie que nos supervise para que no nos distraigamos.

He quedado con Nat sobre las 17:00 y son las 14:15. Así que queda tiempo.

-Bueno, Jaime ¿Qué tal tu primer día?- pregunto para ser cortés
-La verdad, es que muy bien-contesta sonriendo

No te jode, todo el puto recreo rodeada de chicas. Y no pasa de ellas no, liga con todas, coqueteando todo el rato. Entramos a casa y está mi hermano con un amigo, Mario, jugando a la play. Me sube un escalofrío por la espalda y me pongo tiesa. En ese mismo instante Mario para el juego y se levanta para saludarme. Álvaro pone los ojos en blanco y se da la vuelta y mientras Jaime deja la mochila, Mario me planta dos sonoros besos apoyando su mano en mi cintura, bajando más de la cuenta.

-¡Hola Sara! Que guapa hoy ¿no?- dice dulcemente

Creo que no lo he comentado. Mario esta enamorado de mi desde hace siete meses cuando por error me acosté con el. Si, fue por error. No me juzguéis.

-Tu también- digo, pero acto seguido, me arrepiento de esas palabras al ver como se le iluminan los ojos. Veo a mi hermano hacer un gesto, haciendo que vomita. Se me escapa una sonrisa que, Mario, malinterpreta como un punto a su favor.

-Tu debes de ser Jaime ¿no?- comenta celoso
-El mismo-aclara  mirándole ha los ojos maliciosamente con una sonrisa de medio lado.
- ¿Juegas o no?- interrumpe Álvaro- ¿Qué pasa? ¿Tienes miedo “María”?- le reta

Suspiro aliviada.

-Si, juega, yo me tengo que ir a estudiar- comento- además ya he comido así que…

Me dirijo a las escaleras seguida de Jaime, cada uno en su habitación, ya que ha Jaime ya le han traído todas sus cosas y mi hermano se libra de él. Cojo el teléfono y marco el número de Celia.

-¿Si?-contesta una voz al otro lado de la línea
-¡Hola! ¿Miriam?- digo el nombre de su madre- ¿Está Celia en casa?
-Sara-dice con un tono dulce- no, todavía no ha vuelto del instituto ¿A pasado algo?

Abro los ojos como platos. <<Celia no ha ido al instituto>> pienso en respuesta

-No, tranquila. Es que me dijo que a lo mejor iba a comprar material para plástica y que vendría a mi casa directamente- miento- solo he llamado para asegurarme, nada más.

-Pues no, no ha venido
-Muchas gracias, adiós.
-Adiós, bonita- se despide antes de que suene el pitido del teléfono que señala el final de la conversación

Abro el Tuenti rápidamente y busco a Nat. Está conectada.

Yo: Nati, puedes venir antes? A las 4 y media o así?
Natalia: si, supongo ¿x?
Yo: hay un problema con Celia. Pero prefiero hablarlo en persona.
Natalia: OK!, si quieres me paso a las 3 ¿va? ¿es importante?
Yo: teniendo en cuenta que es Cel, si, bastante importante…

Musica